Exvicepresidente y exministro de Hacienda piden acelerar convenio con el Fondo Monetario Internacional
21 junio 20Como si fuera un macabro programa de concursos, Costa Rica tiene que escoger una de tres puertas para enfrentar la crisis económica producto del efecto del COVID-19 en el país. Una es no hacer nada, la segunda es intentar aplacarla solos y la última acudir al Fondo Monetario Internacional (FMI).
Aunque algunos relacionan al FMI con el azufre y la maldad, lo cierto es que a mediados de los ochenta ayudó al país a negociar en términos muy favorables la deuda externa.
Uno de los negociadores de entonces como ministro de Hacienda fue Fernando Naranjo, quien urgió en el programa Matices, que el gobierno firme un convenio para financiar la situación.
El ex vicepresidente de la República, Luis Liberman dijo que la única posibilidad de regresar la confianza, externa e interna, es acudir a un rescate del FMI.
Según publicó el diario La Nación el pasado viernes, el FMI hizo un reporte especial sobre Costa Rica en el estudio de un crédito por 508 millones de dólares solicitados por nuestro país en el que recomienda establecer impuestos ambientales, aumentar los de consumo como el IVA, y crean impuestos especiales
También sugiere congelar los salarios públicos y reformar el servicio civil para disminuir a 67% la deuda pública para el 2025.