Banco Central de España propone tener su propio “petro” aunque pide cautela

El Banco Central de España (BDE) publicó recientemente un informe en el que indica que las monedas digitales y la tecnología blockchain podrían beneficiar la política monetaria y la infraestructura financiera. En ese mismo documento, analiza los pros y los contras de contar con una versión digital de la moneda, en especial para adaptarse al descenso del uso de efectivo y al mayor uso de los medios de pagos digitales.

Para Galo Nuño, el investigador a cargo del informe, sostiene que blockchain podría ser utilizado como plataforma para emitir el dinero. Esta tecnología haría el proceso más ágil, eficiente y transparente y el ente central podría controlar más efectivamente el dinero emitido y en circulación.

Las criptomonedas tendrían estado de curso legal, lo que las haría permeables de que compitan con depósitos de bancos comerciales privados amenazando el sistema bancario actual de reserva fraccional.

La idea de emitir su propio dinero digital no es original de España. Ya lo ha intentado Venezuela con el petro y otras instituciones como el Banco de Inglaterra, el Banco Popular de China o el Banco de Suecia.

A diferencia de bitcoin y otras criptomonedas, las monedas digitales que propone el informe serían de naturaleza centralizada ya que su emisión estaría en manos del organismo estatal.  Bitcoin y otras alcoins, en cambio, son criptomonedas descentralizadas, es decir, que no son controladas por ninguna nación del mundo.

«Un argumento que podría considerarse al momento de evaluar la introducción de las monedas digitales está relacionado con la mejora en la conducción de la política monetaria a través de un mejor control en los retornos de mercado que los ahorradores y los prestatarios deben enfrentar», explicó Nuño. Además, sostuvo que la posibilidad de eliminar las restricciones asociadas con el nivel cero de la tasa de interés es teóricamente atractiva, «especialmente en un entorno de tasas de interés bajas como la actual».