Hoy regresó la Champions League con un partido que llamaba la atención del mundo entero.
Por un lado el Paris Saint Germain que llegaba con la misma promesa de años anteriores, un equipo con grandes figuras, pero que no lograba despegar en la máxima competición europea de clubes.
Por el otro el Barcelona, equipo que en los últimos partidos ha dejado muchas dudas en los aficionados culés.
El encuentro inició y muy pronto a solo 18 minutos del arranque Ángel Di Maria regaló una joya de tiro libre que puso a celebrar a todo París.
Julian Draxler un jugador que llegaba con el cartel de ser figura desde su fichaje, logró el segundo gol tras un robo de balón de Andrien Rabiot, que terminaría en los pies de Marco Verratti quien asistió al alemán para que colocara el 2-0 en el marcador.
Di María sería la figura del partido y con un quiebre de lujo dejó la marca de Andrés Iniesta y así poder sacar un zurdazo desde fuera del área y colocar el balón al angulo derecho de Ter Stegen.
Y para cerrar la fiesta del París, Edison Cavani definió en el área grande con un trallazo de derecha y así dejar el marcador 4-0, un resultado que nunca ningún equipo ha podido dar vuelta en la Champions League.
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