La crisis sanitaria mundial y el incumplimiento de contrato por parte del Santos de Brasil, dieron al traste con la decisión del volante nacional, Bryan Ruiz, para poner fin a la relación laboral con el club carioca.
El manejo de la pandemia en Brasil, sumado al año y medio sin poder jugar, empujaron a Ruiz a buscar un mejor ambiente para su familia.
«Mi familia tiene cuatro meses de estar aquí, encerrados. Tener a la familia en esta situación, en un país donde la situación es complicada; en dónde no estoy sacando provecho de lo que yo quiero hacer, que es jugar fútbol (…) yo creo que fue el momento y tomé la decisión con mi familia», explicó.
Sobre su deseo de volver a jugar, el ex capitán explicó que, su principal deseo sería volver a Europa, sin embargo, ante la coyuntura mundial, está dispuesto a analizar las propuestas que vengan de cualquier parte del mundo, incluso con la posibilidad de volver a Costa Rica.
«La decisión va a depender de la oferta que llegue; es importante donde vamos a vivir. Y yo no voy a exigir jugar, tengo que ganarme los minutos; la parte económica y un lugar donde mi familia este bien, son cosas que voy a analizar. La opción de estar en el país puede volcar la balanza», señaló.
Próximo a cumplir 35 años, y con año y medio sin jugar, Bryan Ruiz, es consciente de que podría estar a las puertas de su último contrato profesional; y reconoce que su contrato puede ser una apuesta para cualquier equipo.
El volante también ahondó en la lesión de espalda que lo aqueja desde hace ya, varios años; reconoció la repercusión que esto puede tener en un contrato y la claridad con la que él le debe hablar a los clubes.
Ruiz sabe que la situación lo obliga a ser realista, y que sus deseos de volver a jugar y poder tener su última eliminatoria mundialista, debe equilibrarlos con las prioridades familiares, económicas y deportivas que tiene para el que podría se el cierre de su carrera profesional.
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