Donald Trump: se hizo justicia con muerte del terrorista de Al Qaeda responsable del ataque al USS Cole

El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, aseguró este domingo que las fuerzas armadas de su país «hicieron justicia» al abatir al terrorista de Al Qaeda Jamal Ahmed Mohammed Ali al-Badawi, cerebro del ataque contra el destructor USS Cole en el año 2000 que se cobró la vida de 17 marinos estadounidenses.

La noticia del abatimiento se había conocido el viernes, luego de que un funcionario del departamento Defensa dijera a la CNN que Al Badawi había muerto en Yemen en una operación entre las tropas leales al gobierno local y los Estados Unidos.

«Nuestro gran ejército ha echo justicia por los héroes muertos y heridos en el cobarde ataque el USS Cole», dijo Trump en su cuenta de Twitter.

El destructor de la clase Arleigh Burke fue objeto de un ataque en el año 2000, cuando dos terroristas suicidas de Al Qaeda se acercaron en un bote inflable e hicieron estallar una carga explosiva junto al casco, provocando la muerte de 17 marinos y heridas de distinto tipo en otros 39 a bordo. El buque se encontraba frentes a las costas de Aden, en Yemen.

«Acabamos de matar al líder del ataque, Jamal al- Badawi. Nuestro trabajo contra Al Qaeda continúa. No pararemos nunca en un nuestra lucha contra el terrorismo islámico radical!» agregó Trump, confirmando los reportes de CNN.

El atentado fue planeado Al Badawi, que hasta el viernes permanecía en una lista de los terroristas más buscados del FBI, y Fahd al-Quso, muerto en 2012 en un ataque con drones en Yemen.

El atentado suicida fue un adelanto del que vendría más adelante, el 11 de septiembre de 2001 en Nueva York, y se cree que algunos de los atacantes de ese día asistieron también con los planes del ataque al USS cole.

Aunque no se conocen detalles de la muerte de Al Badawi, es probable que él también haya sucumbido a un bombardeo con drones, ya que es la forma usual empleada por Estados Unidos para realizar ataques contra la cúpula de Al Qaeda en Yemen, país en el que la presencia estadounidense es constante pero limitada.

De hecho el país se encuentra en un dura guerra civil desde el 2015, cuando los rebeldes hutíes, cercanos a Irán, tomaron la capital Saná, en el oeste, mientras las milicias de Al Qaeda se asentaban en la región desértica del este.

Desde entonces el gobierno yemení, con base en Aden, intenta recuperar el territorio perdido con ayuda de la coalición árabe liderada por Arabia Saudita, mientras Estados Unidos coopera en las operaciones con Al Qaeda.