Diputadas presionan para dejar aprobadas reformas a pensiones judiciales

Por Febe Cruz Brenes

Febe.cruz@monumental.co.cr

@febcrubre

Solo restan siete sesiones para los actuales diputados y es evidente la presión que existe dentro del Congreso para dejar aprobados en este periodo proyectos de Ley importantes y que han tomado meses de negociación.

Ese es el caso de las reformas a las pensiones del Poder Judicial, plan que luego de recibir el aval de la Sala Constitucional está listo para quedar aprobado.

Solo hay algo que lo atrasa. Los diputados necesitan la sentencia completa de los magistrados y que Casa Presidencial lo convoque, por eso presionan para que estos dos escenarios pasen inmediatamente.

Así lo explica Sandra Piszk, diputada del Partido Liberación Nacional (PLN).

Entre los cambios más significativos, el plan propone que la edad de retiro de los funcionarios judiciales se establezca a los 65 años, define un tope de ¢4 millones con respecto al monto de las pensiones y aumenta el porcentaje de cotización de 11% al 13%.

Natalia Diaz, congresista del Movimiento Libertario (ML) teme que si el tema se aplaza a los próximos diputados todo quede solamente en el papel y se atrase.

El régimen actual de pensiones judiciales tiene un déficit proyectado de al menos ¢5,3 billones, según datos de la Superintendencia de Pensiones (Supen), por lo que la reforma vendría a subsanar ese hueco.