El futbolista francés Antoine Griezmann, estrella del Atlético Madrid y reconocido el año pasado por la FIFA como el tercer mejor jugador del mundo detrás de Cristiano y Messi, analizó uno de los temas más tabúes en el fútbol: la homosexualidad. El delantero galo consideró que hay muchos futbolistas gays, pero tienen miedo de declararlo.
«En el fútbol no es habitual, porque nos hacemos los duros y los fuertes. Y tenemos miedo a lo que puedan decir. Yo no tengo nada en contra: respeto a todo el mundo. Hay mucha gente mala en el fútbol. Y pueden tener miedo a ir a los estadios y que les insulten. Yo creo que lo confesaría. Claro, es más fácil decirlo cuando no tienes que pasar por ello», comentó en una entrevista en ICON.
El atacante del Atleti también habló sobre los curiosos gestos de los jugadores, quienes suelen darse palmadas en el trasero y hasta hay algunos que se han besado en la boca en algunas celebraciones: «A veces también acariciamos el pelo del compañero. Eso en la calle no lo hacemos, es verdad. Creo que lo del culo es porque es la parte que está más cerca de la mano. No creo que sea cariño. Yo por tocarle el culo a alguien no le voy a tener más aprecio. Es más como para bromear. A veces, cuando ganas algo importante, se hacen esas cosas… A mí no me gusta, pero podría hacerlo cuando gane un Mundial o la Champions. Depende de la felicidad que pueda tener».
Su admiración por David Beckham
En dicha entrevista, Griezmann habló sobre su intimidad y confesó que es un gran admirador del ex futbolista inglés David Beckham, de quien admira su elegancia y capacidad para verse bien bajo cualquier circunstancia.
«Cada vez que va a un acto siempre hay flashes sobre él y eso indica que llama mucho la atención. Por su pelo, el traje que lleva, la clase que tiene… Eso es lo que más me gusta. Por ejemplo, Beckham puede salir en pijama y está elegante. Cualquier otro le ves en pijama y dices: ‘Vaya pintas’. Pero él, aún así, tiene estilo», explicó.
La relación con su esposa: ‘La jefa’
En la charla con ICON, el futbolista francés confesó que a su mujer le dice «La jefa», porque ella se encarga de todas las tareas del hogar y tiene mucha incidencia en sus decisiones personales: «Hay obras en casa y es ella la que lo maneja todo, los papeles de la casa, del club… Yo me olvido del papeleo. Así solo pienso en el fútbol. Y eso me viene muy bien.»