Cómo es el plan de Italia para construir en Albania centros para migrantes rescatados en el Mediterráneo

Por: Infobae

Italia construirá en Albania centros de identificación y acogida para los migrantes rescatados por sus equipos de salvamento en el Mediterráneo, según un memorando de entendimiento firmado el lunes por la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, y su homólogo albano, Edi Rama.

En una declaración conjunta tras suscribir el pacto en Roma, Meloni y Rama afirmaron que el acuerdo prevé la creación en territorio albano de dos centros con capacidad de hasta 3.000 personas que, una vez entren en funcionamiento a partir de la primavera de 2024 podrán recibir un flujo anual de hasta 36.000 personas.

Según la primera ministra italiana, ello podría contribuir a aliviar el hacinamiento crónico en los centros de tramitación inicial de asilo en Italia, donde en los últimos años cientos de miles de migrantes han puesto pie tras realizar arriesgados viajes por mar a través del Mediterráneo desde Libia, Túnez, Turquía y otros países.

Según el acuerdo, cuyos detalles todavía no fueron revelados, Italia utilizará el puerto de Shengjin, cerca de Bari, y la zona de Gjader, 20 kilómetros tierra adentro, para construir, a sus expensas, dos instalaciones: una para la entrada, para los procedimientos de desembarco e identificación, y otra para la acogida temporal de inmigrantes rescatados en el mar.

Italia pagará la construcción de los centros, dijo Meloni. Si Italia rechaza las solicitudes de asilo, Albania deportará a los inmigrantes. Albania también se encargaría de la seguridad externa de los centros, que estarían bajo jurisdicción italiana.

“Los objetivos del acuerdo son contrarrestar la trata de seres humanos, impedir los flujos irregulares y acoger solo a aquellos que realmente tienen derecho a la protección internacional”, dijo la primera ministra.

Posteriormente, fuentes del Ejecutivo citadas por los medios locales explicaron que en los centro en Albania irán solamente los migrantes rescatados por las autoridades italianas en el Mediterráneo, mientras que los salvados por los buques de las ONG seguirán acudiendo a puertos italianos. La medida también excluye a los inmigrantes que lleguen por sus propios medios a las costas italianas, que serán atendidos allí, y a los menores, embarazadas y personas vulnerables que requieran asistencia inmediata.

Sin embargo, aún no está claro cómo podrán estos barcos desembarcar primero sólo a las mujeres embarazadas y los menores en Italia, y luego llevar al resto de las personas a bordo de los barcos al puerto de Shengjin, que está a unos dos días de navegación de la costa siciliana.

Apoyo italiano al ingreso de Albania en la UE
Con el acuerdo, Albania espera reforzar su candidatura a la Unión Europea. Italia, que comparte con Tirana profundos lazos históricos y culturales, es el principal impulsor de la adhesión albanesa.

Albania “no sólo es amiga de Italia, sino también de la Unión Europea”, declaró Meloni, al agradecer a su par albanés. Albania “se comporta como si fuera uno” de los miembros de la UE.

“Si Italia llama, Albania está ahí. La geografía es ahora la maldición de Italia. Si entras en Italia, entras en Europa”, respondió Rama. El líder albanés expresó su gratitud en nombre de los albaneses que encontraron refugio en Italia y “escaparon del infierno e imaginaron una vida mejor”. Se refería a la afluencia de albaneses a Italia a principios de los años noventa tras el colapso del régimen comunista del país balcánico.

Por su parte, con el memorándum el gobierno italiano busca sumar un aliado que le ayude a gestionar el gran número de llegadas de inmigrantes, un tema que se está convirtiendo en un problema político cada vez mayor para Meloni. La líder ultraderechista había hecho de la lucha contra la inmigración ilegal una de sus principales banderas de campaña y, desde su toma de posesión hace un año, tomó varias medidas para disuadir a los solicitantes de asilo de entrar en territorio italiano, por mar y por tierra.

Sin embargo, en el último año las llegadas se dispararon, con 145.314 migrantes arribados al país. El dato es muy superior a los 88.095 migrantes que arribaron en el mismo periodo de 2022 y los 54.733 de 2021, según datos actualizados por el Ministerio de Interior italiano.

El gobierno culpa de la situación a la falta de solidaridad de otros miembros de la UE en esta materia. Por eso, la líder italiana defendió el acuerdo con Albania, a pesar de que el país no forma parte de la Unión Europea ni del espacio Schengen y, por tanto, tampoco participa en las negociaciones del pacto migratorio con Bruselas. “La colaboración entre Estados de la UE y extracomunitarios es decisiva”, argumentó.

¿Italia-Albania como Reino Unido-Ruanda?
Mientras tanto, el plan italiano para “externalizar” la cuestión de los migrantes ya ha sido puesto bajo la lupa de la UE.

“Estamos al corriente del acuerdo entre las autoridades italianas y albanesas, pero aún no hemos recibido información detallada. Entendemos que todavía tendrá que ser traducido en ley por Italia y posteriormente aplicado. Es importante que cualquier acuerdo de este tipo respete plenamente la legislación internacional y de la UE”, dijo Anitta Hipper, portavoz de la Comisión Europea, el brazo ejecutivo del bloque.

El pacto recuerda al suscrito entre el Reino Unido y Ruanda para la gestión de los inmigrantes que llegan a través del Canal de la Mancha. Según el plan británico, las personas consideradas inmigrantes ilegales o solicitantes de asilo en el Reino Unido deben ser trasladadas a Ruanda a la espera de que se estudien diversas solicitudes. Los que consigan obtener asilo, sin embargo, deberán permanecer en el país africano. El plan del gobierno británico está actualmente bloqueado en los tribunales debido a numerosos recursos, entre ellos de organizaciones de defensa de los derechos humanos.

Sin embargo, la Comisión Europea dijo que el pacto entre Italia y Albania “según nuestras primeras informaciones, parece diferente del que existe entre Gran Bretaña y Ruanda”.

Por otro lado, el acuerdo desató la críticas de la oposición, que acusó al gobierno de crear un “Guantánamo italiano” en Albania, sin posibilidad de controlar las condiciones de los migrantes.

“El gobierno izó la bandera blanca en Europa y encuentra refugio en Albania”, comentó el partido liberal Azione.

Para la líder del opositor Partido Democrático (PD), Elly Schlein, el acuerdo “parece violar abiertamente el derecho internacional y europeo”. Meloni, agregó Schlein, debería más bien “convencer a sus aliados nacionalistas europeos para que compartan la acogida, y no dejen sola a Italia”.