Tras reunirse con el presidente de Corea del Sur, Biden reafirmó su alianza con Seúl y lanzó advertencia al régimen norcoreano
26 abril 23Por Infobae
El Presidente Joe Biden recibió el miércoles a su homólogo surcoreano, Yoon Suk Yeol, en una visita de Estado en la que anunció el refuerzo del escudo nuclear estadounidense para el aliado vital de Washington frente a la agresividad de Corea del Norte.
Tras la reunión, Joe Biden advirtió que el régimen del líder norcoreano Kim Jong-un estaría acabado si lanzara un ataque nuclear contra Estados Unidos o sus aliados.
“Un ataque nuclear de Corea del Norte contra Estados Unidos o sus aliados o partidarios, socios, es inaceptable y resultará en el fin de cualquier régimen que tome tal acción”, dijo Biden en una conferencia de prensa conjunta con el presidente de Corea del Sur.
Este es uno de los mensajes más duros que ha pronunciado el mandatario estadounidense sobre Corea del Norte desde que llegó al poder en enero de 2021.
Además, Biden reafirmó el “férreo” compromiso de EEUU con la defensa de Corea del Sur y afirmó que ese compromiso incluye la defensa de su socio ante cualquier amenaza, incluido un hipotético ataque norcoreano.
“Esto es especialmente importante ante las crecientes amenazas de Corea del Norte”, afirmó Biden.
Por su parte, Yoon anunció el fortalecimiento de la estrategia de “distensión extendida”, un compromiso adquirido por Washington el año pasado y que consiste en el envío de activos estratégicos estadounidenses a la península coreana, como bombarderos o portaaviones, para responder a las acciones del régimen norteño.
“Hemos decidido fortalecer significativamente la distensión extendida de nuestros dos países contra las amenazas nucleares y de misiles de Corea del Norte para que podamos lograr la paz a través de la superioridad abrumadora de nuestras fuerzas armadas y no conformarnos con una paz falsa basada en la buena voluntad del otro lado”, manifestó Yoon, que tiene una línea más dura con Pionyang que su antecesor, Moon Jae-in.
Una guardia de honor militar y cientos de invitados se agolparon frente a la Casa Blanca, donde Yoon y su esposa, Kim Keon Hee, llegaron para una jornada de pompa y ceremonia, y debates geoestratégicos de gran alcance.
Junto a Yoon, Biden alabó lo que calificó de “vínculo inquebrantable” de la “férrea alianza” entre ambos países, forjada en la Guerra de Corea hace siete décadas.
En la actualidad, los aliados son potencias económicas y socios en el mantenimiento de una región Asia-Pacífico “libre y abierta”, afirmó Biden, añadiendo: “El nuestro es un futuro lleno de oportunidades inimaginables”.
Yoon y Biden se reunieron en el Despacho Oval y ofrecieron una rueda de prensa conjunta antes de concluir la jornada con una lujosa cena de Estado en el ceremonial Salón Este.
El acuerdo de miércoles, que responde a la creciente tensión provocada por las pruebas de misiles y el arsenal nuclear de la comunista Corea del Norte, recuerda las medidas adoptadas por última vez cuando Washington supervisaba la defensa de Europa frente a la Unión Soviética.
“En realidad, Estados Unidos no había dado estos pasos desde el apogeo de la Guerra Fría con nuestros aliados más cercanos en Europa. Y estamos tratando de garantizar que al emprender estos nuevos procedimientos, estos nuevos pasos, nuestro compromiso con la disuasión ampliada sea incuestionable”, dijo un alto funcionario.
Los funcionarios, que hablaron bajo condición de anonimato, subrayaron que no hay planes de emplazar armas nucleares estadounidenses en Corea del Sur, una diferencia con respecto a la Guerra Fría, cuando las armas estratégicas estadounidenses se desplegaban en Europa.
Además, Seúl reiterará su compromiso en la declaración de no buscar su propio arsenal nuclear.