La tormenta Elliot se debilita pero mantiene a EEUU sumido en bajas temperaturas, hay 2.800 vuelos cancelados y persiste el peligro en las carreteras
25 diciembre 22El servicio meteorológico informó que el frente ártico avanza lentamente hacia el este mientras pierde fuerza. 190.000 personas permanecen bajo alerta por nevadas y 260.000 usuarios siguen a oscuras, entre hogares y negocios
Por: Infobae
La tormenta invernal Elliot, que ha congelado a Estados Unidos en plenas festividades navideñas, comenzó a remitir este domingo, aunque todavía mantiene al país sumido en bajas temperaturas y con algunos estragos en aeropuertos y carreteras.
El servicio meteorológico nacional, el National Weather Service (NWS), pronosticó este domingo de Navidad que el frente ártico “avance lentamente hacia el este mientras se debilita”, dejando todavía bajas temperaturas y algunas nevadas.
“Se espera que las condiciones mejoren lentamente a medida que el sistema se debilite. Sin embargo, viajar en estas condiciones será extremadamente peligroso” en algunas zonas, advirtió el organismo en un comunicado.
Según el parte del NWS de las 13.30 horas GMT, ya solo 190.000 personas están bajo alerta por tormenta de nieve, concentradas en el estado de Nueva York. En la víspera, eran 4 millones de habitantes.
Los estragos de Elliot todavía se sienten en los aeropuertos de Estados Unidos, donde han sido cancelados 2.800 vuelos en este domingo de Navidad, según datos del portal Flight Aware.
Permanecen cerrados los aeropuertos de Milwaukee (Wisconsin) y de Búfalo (Nueva York).
El servicio eléctrico, afectado por los fuertes vientos, las nevadas y la alta demanda, ya ha sido restablecido en buena parte de Estados Unidos, donde quedan 260.000 usuarios a oscuras, entre hogares y negocios, de acuerdo al rastreador Power Outage.
Al menos 22 muertos
En total, las autoridades han confirmado al menos 22 muertes, en ocho estados, debido a las inclemencias del clima.
Algunas de esas muertes han ocurrido en las carreteras, que se han vuelto muy peligrosas, como en Ohio, donde cuatro personas murieron en accidentes relacionados con tormentas, dijo el gobernador Mike DeWine.
Ciudades como Denver o Chicago han abierto refugios para acomodar a las personas sin hogar y protegerlas del riesgo de hipotermia.
Debido a las bajísimas temperaturas, la presión sobre la red eléctrica era extremadamente alta: hasta 1,7 millones de personas se quedaron sin electricidad, según Poweroutage.us.
La energía eléctrica se restableció en gran parte el sábado por la noche, pero en algunos lugares se pidió reducir el consumo y hubo cortes del servicio.
Sobre las 11H30 GMT del domingo, alrededor de 173.000 usuarios seguían sin electricidad debido a las afectaciones por el frío extremo, de acuerdo con Poweroutage.us. Los estados más afectados a esa hora eran Maine, Nueva York, Virginia, New Hampshire y Pensilvania.
Algunas ciudades, especialmente en Carolina del Norte, tuvieron que cortar temporalmente la energía debido a la alta demanda de electricidad, dejando a hogares sin calefacción.
Frío extremo
Desde la tarde del viernes, la tormenta se ha convertido en una “bomba de baja presión”: un choque entre dos masas de aire, una muy fría del Ártico y otra tropical del Golfo de México. Las bombas de baja presión pueden producir fuertes lluvias o nevadas, inundaciones costeras y vientos huracanados.
Según los meteorólogos, el frío gélido continuará en todo el centro y este de Estados Unidos durante todo el fin de semana antes de que las temperaturas regresen a niveles más normales la próxima semana.
Hasta entonces, “si debe viajar o estar al aire libre, prepárese para el frío extremo usando varias capas de ropa y cubriendo la mayor cantidad de piel posible”, señaló el NWS.
“En algunos lugares, estar afuera podría causar congelación en cuestión de minutos”, advirtió.
Canadá también se vio afectado por la tormenta y todas las provincias tenían alertas meteorológicas.
Cientos de miles de personas se quedaron sin electricidad en Ontario y Quebec, y los aeropuertos de Vancouver, Toronto y Montreal sufrieron cancelaciones de vuelos.