Sistema de emergencias 9-1-1 advierte que regla fiscal pone en riesgo su funcionamiento

Por: Fernando Muñoz
Fernando.munoz@monumental.co.cr

El Sistema de Emergencias 9-1-1 advirtió que la continuidad de sus operaciones se encuentra en riesgo, debido a que la regla fiscal le impide ejecutar recursos con los que cuenta para brindar el servicio.

La institución enfrenta un colapso los fines de semana, cuando recibe reportes de todo tipo de emergencias en distintos sectores del país. A esto se le suman 800 llamadas, en promedio, alertando sobre fiestas masivas y otros incumplimientos a las medidas sanitarias en el marco de la pandemia.

Elena Amuy, directora del 9-1-1, señaló que el impedimento para invertir en las necesidades inmediatas pone en peligro el servicio que reciben los costarricenses.

Un reciente informe de la Contraloría General de la República (CGR) señala que los ingresos del 9-1-1 se incrementaron en ¢188 millones en la primera mitad del año, principalmente por un mayor uso de la telefonía y el internet durante la pandemia.

De acuerdo con Amuy, la regla fiscal les impide utilizar esos recursos para atender las necesidades operativas que tienen en este momento.

Semanas atrás, el gobierno tomó la decisión de eximir parcialmente de la regla fiscal a instituciones como el Consejo Nacional de Producción (CNP), el Ministerio de Educación Pública (MEP) y el Instituto Nacional de Aprendizaje (INA).