China quiere reformar la justicia de Hong Kong e imponer su control político
17 noviembre 20Por: Infobae
Un alto funcionario chino se sumó este martes a los llamamientos a “reformar” la justicia de Hong Kong, lo que sugiere que Beijing desea reforzar su control de un sistema judicial teóricamente independiente.
Hong Kong ha forjado su prosperidad gracias a su acervo de leyes, heredado de la corona británica y ampliamente reconocido internacionalmente por su transparencia.
Un sistema que contrasta fuertemente con la justicia opaca y muy politizada de China continental.
La antigua colonia británica fue escenario en 2019 de una amplia movilización para pedir más reformas democráticas. A lo que Beijing respondió con una mayor represión de todas las formas de disidencia y una fuerte control de la ciudad.
Miles de personas han sido detenidas desde hace un año. Pero decenas de absoluciones recientemente pronunciadas por los magistrados, a veces acompañadas de críticas sobre el comportamiento de las fuerzas del orden, han dado lugar a una actitud defensiva en el campo pro-Beijing.
El martes, un alto funcionario chino dijo que había llegado el momento de revisar el funcionamiento del sistema judicial en Hong Kong.
“Incluso en los países occidentales, los sistemas judiciales deben actualizarse y reformarse constantemente”, dijo el subdirector de la oficina de asuntos de Hong Kong y Macao del régimen comunista, Zhang Xiaoming, con motivo del 30 aniversario de la Ley Fundamental (“Basic Law”) que sirve de mini constitución a la región semiautónoma.
“Esto no cambia la independencia de la justicia”, continuó.
Zhang aclaró cuáles deberían ser las reformas de la justicia de Hong Kong. Pero citó el nombre de Henry Litton, un magistrado retirado que ha escrito en los últimos meses varias tribunas criticando el funcionamiento de la justicia en Hong Kong.
Las palabras del funcionario llegan unos días después que los diputados de la oposición en Hong Kong renunciaran en masa a su escaño en el Parlamento local para protestar por el creciente control de Beijing sobre el legislativo local, después de que cuatro de ellos fueran destituidos por no cumplir con la ley de seguridad nacional aprobada por China el pasado junio.