España cambia su estrategia ante el rebrote de coronavirus: las regiones podrán imponer cuarentenas y habrá militares para rastrear contagios

Por Infobae

En un cambio de estrategia en la lucha contra el coronavirus en España, el presidente del gobierno Pedro Sánchez prometió este martes declarar estados de emergencia a nivel regional si la propagación del Covid-19 continúa, lo que daría a los líderes regionales más autoridad para restringir el transporte e imponer órdenes de confinamiento.

Sánchez también ofreció a las regiones del país ayuda de las fuerzas armadas para rastrear a personas que podrían haber estado en contacto con enfermos de coronavirus y exhortó a la población a bajar una aplicación para celulares ofrecida por el gobierno y que permite el rastreo de personas enfermas.

“Los datos no son buenos, son preocupantes”, dijo Sánchez en una declaración en La Moncloa tras el Consejo de Ministros de este martes. Sin embargo, agregó: “Estamos lejos de la situación de mediados de marzo y no debe producirse un miedo que nos paralice y nos deje actuar”.

A mediados de marzo el gobierno impuso un estado de emergencia que se extendió hasta junio, cuando la medida fue suprimida debido a la presión de la oposición y de las regiones que pedían recuperar sus competencias.

Ahora, el nuevo enfoque permite a las autonomías solicitar al Gobierno la declaración de estado de alarma para confinar a la población o adoptar otro tipo de medidas de control. La decisión de Sánchez busca aumentar la responsabilidad de las comunidades autónomas, que deberán asumir el costo político de las medidas y comparecer ante el Congreso para defender los motivos.

Varios medios españoles subrayaron que la medida, que choca con el pedido de algunos presidentes de mayor iniciativa del Gobierno frente al aumento de los casos, parece estar dirigida a comunidades como Madrid, gobernada por el opositor Partido Popular y una de las más críticas con la gestión del gobierno central.

Por otra parte, en el marco de un mecanismo que según el jefe del Ejecutivo busca reforzar la cooperación, se anunció la disposición para las comunidades autónomas, “sobre todo en aquellas con más dificultad”, de 2.000 militares para labores de rastreo de contactos de positivos con COVID-19.

Asimismo, Sánchez exhortó a todas las comunidades autónomas a que adopten en sus territorios la aplicación ‘Radar COVID’ de detección de contactos.

El cambio de estrategia ocurre justo antes del inicio del año escolar, mientras las familias siguen preguntándose cuáles son las medidas definitivas de cada una de las regiones y el Gobierno español para que en los centros se garantice una vuelta segura para sus hijos.

Los casos de coronavirus en España superan los 386.000 desde el inicio de la pandemia, mientras que la cifra de fallecidos roza los 29.000, con más de mil brotes activos que en la actualidad afectan a un porcentaje muy elevado de población joven.

Por eso, Sánchez ha instado a “tomar el control” para “doblegar esta segunda curva que vuelve a elevarse de manera amenazante”, insistiendo en que resulta “fundamental” que los ciudadanos continúen utilizando las mascarillas, lavándose las manos y guardando la distancia de seguridad, ya que “son gestos de solidaridad imprescindibles”.

Sobre las causas del gran aumento de casos de COVID-19 en las últimas semanas, Sánchez señaló que es “evidente” y “público” que se deben principalmente a las reuniones familiares y están vinculadas al ocio nocturno. En este sentido, ha advertido de que “la población más joven se siente mucho más inmune a los efectos del COVID-19, pero se pueden convertir en vectores que ataquen a colectivos mucho más vulnerables”.

Sin embargo, el jefe del Ejecutivo defendió que las causas del aumento de casos “son las mismas que en el resto de Europa”.

Por su parte, la oposición criticó el nuevo enfoque. El líder del Partido Popular, Pablo Casado, dijo que el cambio de estrategia demuestra que Sánchez “se ha lavado las manos” y “se escabulle en otras administraciones de sus responsabilidades ante la peor pandemia que ha sufrido España en el último siglo”.