La plataforma de alquileres vacacionales y de corta duración Airbnb reveló este martes que planea despedir a 1.900 empleados que constituyen un 25 % del total de su plantilla a raíz del parón en la actividad turística en todo el mundo causada por la pandemia del COVID-19.
En una carta enviada a sus empleados y a la que tuvo acceso EFE, el consejero delegado y cofundador de Airbnb Brian Chesky anunció los despidos, y también reveló que reducirán la inversión y pararán proyectos en las divisiones de hoteles, experiencias de lujo, transporte y producciones audiovisuales (Airbnb Studios).
“Como no nos podemos permitir hacer todo lo que hacíamos antes, estos recortes han ido dirigidos a reconvertirnos en un negocio más centrado en nuestra actividad principal”, apuntó Chesky.
Airbnb, con sede en San Francisco (California, EEUU) tiene unos 7.500 trabajadores en todo el mundo, la mayoría de los cuales están en Estados Unidos.
Los empleados de EEUU que sean despedidos recibirán una compensación de 14 semanas de salario completo más una semana adicional por cada año que hayan trabajado para la empresa, así como un año entero de seguro médico gratuito.
El sector turístico ha sido uno de los más afectados por las restricciones a la movilidad y las órdenes de distanciamiento social decretadas para luchar contra la pandemia, y que se prevé sea uno de los que más tiempo tarde en recuperarse.
El mismo Chesky reconoció en su misiva a los trabajadores que prevén que los ingresos de este año sean menos de la mitad de los facturados en 2019.
Airbnb está viviendo en 2020 uno de los momentos más difíciles de su historia desde que fue fundada en 2008, coincidiendo con el que, sólo unos meses atrás, se esperaba que fuese su año de gloria al estar creciendo a un gran ritmo y prever su salida a los mercados de valores, algo que finalmente no ocurrirá.