Minuto a minuto: se debaten en el Senado de EEUU las reglas que regirán el juicio político contra Donald Trump
21 enero 20El líder de la mayoría republicana en la Cámara Alta
El histórico juicio político contra el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, comienza este martes en el Senado en medio de una fuerte pugna entre la oposición demócrata y los republicanos -que controlan la Cámara alta- por las reglas que regirán el proceso.
Cuatro meses después de que explotara el escándalo ucraniano que lastró el gobierno de Trump a 10 meses de las elecciones presidenciales, los 100 senadores se reunieron en el hemiciclo para el juicio que comenzó a las 13:00 (18:00 GMT) y que probablemente concluirá con la absolución del mandatario.
Trump se convierte así en el tercer presidente en la historia de Estados Unidos en ser sometido a juicio político, después de Andrew Johnson en 1868 y Bill Clinton en 1999.2:20 (ET): Terminado el argumento inicial de Schiff, Pat Cipollone volvió a tomar el estrado para ejercer su derecho a réplica. inmediatamente rechazó los argumentos presentados y aseguró que, en contraste con lo asegurado por el fiscal, quienes no habían garantizado las provisiones de un juicio justo en la Cámara de Representantes habían sido los demócratas.
“Nos negaron la posibilidad de cuestionar a los testigos, de estar presentes en las audiencias y de acceder a la evidencia. Es un tridente que viola la Constitución», expresó.
Desde Davos, donde asiste al Foro Económico Mundial, Trump hizo referencia al juicio político. Al igual que ya lo ha hecho en numerosas ocasiones, pidió que “se lean las transcripciones” en el centro del caso: es decir, su llamada con el presidente ucraniano que los demócratas indican constituye un abuso de poder.1:45 (ET): Los líderes de las distintas partes hicieron sus declaraciones iniciales, en las que defendieron sus argumentos acerca de las reglas que el proceso debe seguir.
Tanto el equipo legal de la Casa Blanca como los senadores republicanos se han manifestado a favor de un juicio rápido, en el que se use la evidencia producida en la instrucción que tuvo lugar en la Cámara de Representantes.
Los demócratas, en contraste, han asegurado que la propuesta implicaría no tener un proceso justo y, consistentemente, han solicitado la posibilidad de presentar nueva evidencia y llamar testigos a declarar.
“Han hecho un juramento para ser imparciales.
Eso los ata. Nada importa excepto el juramento. Y ese requiere un juicio justo. Para el Presidente y para el pueblo americano. ¿Pero es eso posible? O, como los padres fundadores temían, la polarización impide que eso suceda”, indicó el líder del equipo de congresistas demócratas que ofician como fiscales, Adam Schiff.
Schiff reconoció que el líder republicano en la Cámara Alta, Mitch McConnell, cuenta con los votos para aprobar su resolución. Sin embargo, indicó que espera torcer algunas voluntades para “tener un juicio justo”. “Si el Senado vota privarse de evidencia y testigos, eso significa el fin del juicio.
Es esconderlo bajo la alfombra”, agregó. Para fundamentar su argumento, hizo referencia a la declaración del ex asesor de seguridad nacional, John Bolton, acerca de su voluntad de declarar en el juicio; y el informe de la Oficina de Responsabilidad del Gobierno, que concluyó que la administración de Trump violó la ley cuando retuvo la ayuda militar aprobada por el Congreso para Ucrania.
También pidió llamar al jefe de Gabinete interino, Mick Mulvaney, y a Lev Parnas, un socio del abogado personal de Trump, Rudy Giuliani, quien la semana pasada presentó evidencia que los demócratas aseguran fortalece su caso.
“Si quieren un juicio justo, emitan las citaciones ahora”, dijo Schiff, antes de presentar un video en el que el presidente Trump indicaba su disposición a dejar que los funcionarios de su administración declararan en el juicio.
Además, recordó que en todos los juicios que tuvieron lugar en el Senado, incluyendo los “impeachments” contra los presidentes Andrew Johnson y Bill Clinton, incluyeron testigos y la presentación de nueva evidencia.
En otro pasaje de su presentación, Schiff presentó un resumen de la evidencia que tomó estado público desde que la acusación fue presentada el año pasado, así como la reticencia de la Casa Blanca a facilitar los documentos requeridos por los demócratas que lideraron la investigación en la Cámara de Representantes.
Para concluir, Schiff volvió a pedir por un “juicio justo” y aseguró que “en última instancia, los hechos van a salir a la luz”. “Los documentos que están escondiendo van a salir a la luz. Los testigos contarán sus historias en libros o películas”, aseguró.
Y cerró: “El juicio debería ser justo para la Cámara de Representantes, que fue ilegalmente privada de acceder a evidencia. Al Presidente, que no se beneficiaría de ser sobreseído si el juicio no es visto como imparcial. Y para el Senado, que debería poder ver analizar todos los hechos”.
1:20 PM (ET): el presidente de la Corte Suprema, John Roberts, dio inicio formal al proceso del juicio político a en el Senado. La sesión está destinada a definir las reglas del proceso.
El líder de la mayoría republicana en el Senado de Estados Unidos, Mitch McConnell, presentó el lunes una resolución con las reglas para llevar a cabo el juicio político contra el presidente Donald Trump, acusado de haber abusado el poder de su oficina al retener ayuda militar a Ucrania a cambio de que el país llevara a cabo una investigación contra su rival político, Joe Biden, y luego obstruir la investigación del Congreso sobre el hecho. La votación al respecto, que tendrá lugar este martes, marcará el comienzo oficial del proceso, el tercero en la historia del país.
En concreto, McConnell propuso que cada las partes -los demócratas, que actuarán como fiscales, y la defensa de la Casa Blanca- tengan 24 horas para presentar sus argumentos, y que estas se dividan en turnos de 12.
La cantidad de tiempo es la misma asignada en el juicio político de Bill Clinton, el antecedente más reciente. Luego de que distintos senadores mostraran preocupación por esta regla, McConnell introdujo un cambio que permite la posibilidad de dividir las 24 horas de argumentos en tres días.
Terminados los alegatos iniciales, los 100 senadores que componen la Cámara Alta -y ofician como jurados- tendrían 16 horas para plantear preguntas. Y en base a la información presentada en ambos casos votarán para decidir si llaman nuevos testigos a declarar y también si se permite la presentación de nueva evidencia.
Para cualquiera de las dos cosas es necesario el acompañamiento de la mayoría del cuerpo, que está en manos de los republicanos, que parecen inclinados a negarse y a optar por un juicio abreviado. Los demócratas aspiran a convencer a algunos indecisos.
Los siete congresistas demócratas -que ofician como fiscales en el proceso- han rechazado la propuesta. El líder de la minoría demócrata, Chuck Schumer, dijo que “un juicio sin evidencia no es un juicio, es un encubrimiento”.