La Cámara de los Comunes británica aprobó la realización de elecciones anticipadas el 12 de diciembre

Por Infobae

El Reino Unido se prepara para celebrar elecciones generales anticipadas el 12 de diciembre. Tras tres intentos fallidos, el primer ministro Boris Johnson logró que la Cámara de los Comunes apoyara su cuarto intento de adelantar los comicios, gracias a recibir el acompañamiento del Partido Laborista.

Los legisladores votaron por 438 a 20 a favor de celebrar elecciones un mes y medio antes de la nueva fecha límite para el Brexit, el 31 de enero. Será la primera vez que el país vaya a las urnas en diciembre desde 1923.

Si la Cámara de los Lores aprueba este miércoles el proyecto de ley, como se descuenta, el Parlamento quedará automáticamente disuelto. Entonces comenzará una breve campaña electoral de cinco semanas, en la que Johnson pretende conseguir una mayoría más consolidada para salir de la Unión Europea. En cambio, los laboristas de Jeremy Corbyn aspiran a recuperar el gobierno tras nueve años de administraciones conservadoras.

La decisión de la cámara baja llega apenas horas después de que la UE acordara formalmente posponer el Brexit por tercera vez, ya que el deadline era este jueves 31 de octubre. Es lo que Johnson quería desde hace tiempo, ya que lidera un gobierno minoritario, que estaba estancado porque los legisladores rechazaron los términos del acuerdo que alcanzó con Bruselas hace menos de dos semanas para una ruptura no traumática con la UE.

Sus conservadores están actualmente muy por delante del Partido Laborista en las encuestas de opinión. No obstante, por no haber cumplido su promesa de abandonar la UE el 31 de octubre sin importar las consecuencias, corre el riesgo de que se produzca una reacción adversa entre los votantes euroescépticos, que podrían inclinarse por el Partido del Brexit, de Nigel Farage.

El resultado de las elecciones podría tener enormes implicaciones para el tortuoso proceso de salida, que comenzó con el referéndum de 2016. El Partido Laborista está comprometido con una nueva consulta popular y otros dos pequeños partidos de la oposición quieren revertir el Brexit.

Antes de la votación en el Parlamento, el Presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, había confirmado la adopción formal de la decisión tomada el lunes de aceptar un retraso del Brexit de hasta tres meses. “Para mis amigos británicos, la UE ha adoptado formalmente la prórroga. Puede que sea la última. Por favor, hagan el mejor uso de este tiempo”, dijo en Twitter.

Johnson asumió como primer ministro en julio con la promesa de poner fin a la disputa sobre el Brexit, que ha dividido amargamente al país. Pero una rebelión por su estrategia de línea dura, que buscaba una salida sin acuerdo, potencialmente caótica, lo dejó sin mayoría.

Incapaz de conseguir el apoyo de los diputados a las nuevas condiciones de divorcio que estableció con Bruselas, se vio obligado por ley a principios de este mes a pedir a los líderes de la UE un aplazamiento, algo que había jurado evitar.

Después de tres intentos fallidos de aprobar una moción para adelantar las elecciones apelando a las leyes vigentes, que requiere el apoyo de dos tercios de los legisladores, Johnson tomó el martes un camino alternativo. Presentó un nuevo proyecto de ley para convocar a una elección en diciembre, un método que requería sólo una mayoría simple y que fue aprobado por 438 votos a favor y 20 en contra.

“No nos queda más remedio que ir al país para salir de este callejón sin salida”, había dicho a los diputados. Un parlamento recién elegido tendría un “nuevo mandato para cumplir con la voluntad del pueblo y hacer cumplir el Brexit”, dijo.

En un movimiento para unir al Partido Conservador antes de las elecciones, Johnson readmitió a 10 de los 21 legisladores que había expulsado el mes pasado por desafiar su estrategia hacia el Brexit.

Por su parte, Corbyn había intentado enmendar el proyecto de ley del gobierno para celebrar las elecciones el 9 de diciembre en lugar del 12, pero no consiguió apoyo suficiente. El Partido Nacional Escocés y los Liberales Demócratas querían ir a las urnas, lo que dificultaba que los laboristas se interpusieran en su camino.

Corbyn había argumentado públicamente que no permitiría una elección hasta que la amenaza de Johnson de abandonar la UE sin un acuerdo fuera eliminada. “Ahora lanzaremos la campaña más ambiciosa y radical que nuestro país haya visto por un cambio real», sostuvo.