El Tribunal Supremo de España suspendió la exhumación del cuerpo del dictador Francisco Franco
04 junio 19La máxima autoridad judicial del país
El Tribunal Supremo español anunció este martes la suspensión cautelar de la exhumación de los restos del dictador Francisco Franco de su mausoleo en las afueras de Madrid, programada por el gobierno socialista para el 10 de junio.
La decisión es temporal hasta la resolución de los recursos presentados por la familia del dictador, que dirigió el país entre 1939 y 1975, y está enterrado en una basílica en el faraónico complejo del Valle de los Caídos.
«La razón en que descansa esa decisión es la de evitar el perjuicio que, de otro modo, se causaría a los recurrentes (…) si, exhumados esos restos, se estimara el recurso y fuera preciso devolverlos al lugar en que se hallan», argumentó el Supremo en un escueto comunicado.
«El Gobierno pospondrá la ejecución de la exhumación hasta que en los próximos meses se dicte Sentencia sobre el fondo del asunto», señaló el ejecutivo del socialista Pedro Sánchez en una nota donde se muestra «convencido de que el Tribunal Supremo desestimará este recurso».
El Gobierno había comunicado en marzo su intención de concretar el procedimiento el próximo 10 de junio. La intención era remover el cuerpo del Valle de los Caídos y enterrarlo en un cementerio en la localidad de El Pardo (Madrid).
Se iba a hacer sin comunicación ni imágenes, ni convocatoria pública, según anunció la vicepresidenta del Ejecutivo, la socialista Carmen Calvo. No se trata de un «espectáculo», argumentó Calvo, y en todo caso los familiares podrán asistir a la exhumación y a la inhumación posterior, aclaró.
Franco fue enterrado en la basílica del Valle de los Caídos, un monumento que él mandó construir a 50 kilómetros de Madrid y donde también están los restos de miles de combatientes de los dos bandos de la Guerra Civil española (1936-1939).
Antes de presentar el recurso, los nietos de Franco -sus parientes vivos más cercanos- advirtieron por carta al Gobierno que consideraban «nulo de pleno derecho» el acuerdo del Consejo de Ministros de febrero por el que se les daba un plazo de 15 días para determinar un nuevo lugar para la inhumación de su abuelo.
El acuerdo del Gobierno excluía expresamente la cripta de la catedral de la Almudena, en el centro de Madrid, como posible ubicación de los restos por razones de «orden público» y para evitar homenajes al dictador. Pero los familiares insistían en que es en ese lugar donde quieren que sea enterrado de nuevo si la Justicia dictamina que los restos deben salir del Valle de los Caídos.
El Ejecutivo había establecido que determinaría unilateralmente el lugar de enterramiento definitivo de Franco si la familia no aceptaba fijar un lugar alternativo a la catedral.
En cuanto al futuro del recinto del Valle de los Caídos, Calvo apuntó que «lo urgente» es el traslado y después dar los pasos para convertirlo en un lugar de «respeto, reposo y recuerdo» para las más de 30.000 víctimas allí enterradas.
Según el Ejecutivo, el cementerio de Mingorrubio-El Pardo, donde ya se encuentra enterrada la esposa de Franco, Carmen Polo (1900-1988), permite «garantizar tanto las condiciones de dignidad y respeto como la digna sepultura exigidas».
En El Pardo, en la periferia de Madrid, se encuentra el palacio donde vivió Franco hasta su muerte y que hoy sirve de residencia de los jefes de Estado extranjeros cuando realizan una visita oficial a España.