Varias regiones de Venezuela se mantienen sin electricidad desde la noche del martes tras un apagón que afectó a casi todo el país, incluida Caracas, en medio del plan de racionamiento de energía con que el régimen ya corta la luz al menos 18 horas por semana a millones de ciudadanos.
En Caracas, el fluido eléctrico fue interrumpido dos veces durante la madrugada de este miércoles y hacia las 11:30 GMT prácticamente toda la capital ya había sido reconectada. El servicio de metro, que usan diariamente cientos de miles de personas, fue abierto aunque con retraso.
Mientras tanto, los estados Trujillo (oeste), Falcón (noroeste), Carabobo (norte) y los fronterizos con Colombia Zulia y Táchira siguen a oscuras desde anoche, aseguraron residentes a EFE, sin que hasta ahora la estatal Corporación Eléctrica (Corpoelec) ni ninguna autoridad se haya pronunciado sobre este fallo.
Medios locales y dirigentes opositores sostienen que 20 de los 23 estados del país petrolero se vieron afectados por el apagón y que la mayoría de esos territorios siguen sin energía desde anoche.
Venezuela ha registrado desde el 7 de marzo varios cortes de luz, algunos de los cuales se han prolongado más de 24 horas, que han paralizado todas las actividades al menos durante doce días.
El régimen de Nicolás Maduro ha responsabilizado a la oposición y a la Administración estadounidense de unos supuestos ataques electromagnéticos contra el sistema eléctrico que han causado los apagones.
El Ejecutivo formó un Estado Mayor para atender la crisis, anunció la modernización y reestructuración de Corpoelec y puso en marcha hace diez días un plan de racionamiento de la electricidad que excluye a Caracas, Vargas (norte), Amazonas (sur) y Delta Amacuro (noreste).
La oposición, por su parte, asegura que la corrupción en el ministerio de Energía Eléctrica y malos manejos de miles de millones de dólares destinados al sector son los responsables de la crisis actual.