Abusos en Chile: los obispos dicen que llegan a la reunión con el papa Francisco llenos de «dolor» y «vergüenza»
15 mayo 18Los encuentros comenzarán este martes a primeras horas de la tarde

Los obispos chilenos acuden a escuchar al papa Francisco con «dolor» y «vergüenza», después de que les haya convocado en el Vaticano por su gestión poco transparente en los casos de abusos a menores en ese país, según informaron portavoces de la Conferencia Episcopal de Chile.
El secretario general de la Conferencia Episcopal de Chile, el obispo Fernando Ramos Pérez, aseguró en un encuentro con la prensa que la actitud de los 34 obispos que han llegado a Roma es la de «dolor, porque hay personas que han sido víctimas de abusos, y esto nos causa profundo dolor», pero también de «vergüenza, porque los abusos se han producido en ambientes eclesiales donde jamás deberían suceder este tipo de abusos».
Subrayó que «la disposición de todos los obispos que han llegado es la de escuchar con humildad de espíritu» lo que les comunicará el Papa.
Ramos Pérez, en nombre de los obispos chilenos, explicó que «tienen la obligación moral de estar con las víctimas» y que todos tienen «que pedir perdón hasta setenta veces siete» y esperan «que este pedir perdón pueda ser reparador».
Explicó que a las reuniones, que comenzarán este martes a primeras horas de la tarde, participarán todos los obispos junto al Papa, quien les comunicará sus conclusiones tras leer el informe realizado por el arzobispo maltés Charles Scicluna sobre los abusos cometidos por el clero en Chile.
Francisco convocó a los obispos después de haber constatado que fue mal informado respecto al obispo de la diócesis de Osorno, Juan Barros, a quien acusan de que sabía que el cura Fernando Karadima abusó durante años de menores.
El Papa, que hizo obispo a Barros, le defendió públicamente en varias ocasiones, también durante su viaje a Chile, e incluso rechazó su renuncia hasta dos veces convencido de su inocencia a pesar de la insistencia de las víctimas sobre que era un encubridor.
El también arzobispo auxiliar de Santiago agregó que tras escuchar con «espíritu de humildad» a Francisco esperan «abrir una fase de discernimiento que ayude a ver las responsabilidades de cada uno de ellos en las heridas que han causado los abusos y para que nunca más se repitan».
Ante las preguntas sobre cuáles pueden ser las decisiones que tome el papa Francisco tras estas reuniones, como el apartar a los obispos acusados por no haber informado correctamente o por encubrir los abusos, los portavoces de la Conferencia Episcopal rechazaron responder al asegurar que la decisión compete al pontífice.
Por su parte, el obispo de San Bernardo, Juan Ignacio González Errázuriz, aseguró que descubrir estos casos de abusos en la Iglesia chilena «ha sido sorpresivo y dolorosísimo».
Sobre a quién achacar las responsabilidades de este escándalo, González Errázuriz afirmó que cada uno debe «discernir personalmente, y no se puede juzgar a los demás», pero que «el Papa tiene sus ideas» y ellos las van a respetar.