China inauguró su base militar en África, la primera fuera de su territorio
01 agosto 17El gobierno de China abrió este martes oficialmente su primera base militar en el extranjero en Djibouti, en el Cuerno de África, en coincidencia con el 90 aniversario del Ejército de Liberación Popular (ELP).
Este centro de «apoyo logístico», que comenzó sus operaciones tras la llegada de los equipos enviados el pasado 12 de julio, respaldará a las tropas chinas que participan en misiones contra la piratería, que abunda en la región, operaciones de paz y rescates en el golfo de Adén y la costa de Somalia.
Las autoridades inauguraron la instalación con una ceremonia a la que asistieron más de 300 personas, entre ellas, el ministro de Defensa de Djibouti o el subcomandante de la Armada china Tian Zhong, publicó el periódico estatal Diario del Pueblo.
También participaron cinco unidades militares chinas y tres formaciones de la Guardia de Honor de Djibouti, la pequeña y extremadamente pobre república situada al sur del mar Rojo, entre Eritrea, Etiopía y Somalia y en el denominado Cuerno de África.
La inauguración de esta estratégica base militar anunaciada en enero de 2016 y terminada el 11 de julio coincide con el 90 aniversario del Ejército chino, una celebración en la que el presidente Xi Jinping aprovechó para reivindicar el papel de las Fuerzas Armadas y advertir de que China está lista para «luchar contra cualquier invasión extranjera».
En un discurso en el Gran Palacio del Pueblo en Beijing, sede del Legislativo, Xi consideró que el Ejército ha devuelto el honor a China como gran potencia y enfatizó que sus Fuerzas Armadas tienen un importante rol para mantener la paz mundial.
Desde que a finales de 2015 China manifestó su interés en abrir una instalación de este tipo, el Gobierno de Beijing ha insistido reiteradamente en que no se trata de una expansión militar, sino de una instalación para actividades internacionales y protección de las vías de comercio marítimo.
Djibouti ya cuenta con bases militares de EEUU, Francia y Japón, que sirven entre otros objetivos para dar apoyo a navíos de guerra que escoltan a convoyes de ayuda humanitaria a diversos países de la región o vigilan las aguas de la zona contra la piratería marítima.
Por otro lado China protagoniza desde hace un mes una escalada de tensiones con la India en una triple frontera que ambos países mantiene con Bután en Kachemira y que es fuente de reclamos territoriales cruzados, en especial debido al proyecto de la «Nueva Ruta de la Seda» que Beijing intenta desarrollar con un sistema de rutas en la región.
De hecho gran parte de la región fronteriza entre ambos países se encuentra en disputa, por la cual se han producido guerras y escaramuzas en el pasado.
De esta manera, la base en Djibouti, la primera instalada por Beijing fuera de su territorio, ha generado preocupación en Nueva Delhi, ya que se suma a una serie de tratados que China ha celebrado con Bangladesh, Myanmar y Sri Lanka mediante los cuales la India estaría quedando encerrada.
Mientras que Beijing mantiene otra serie de disputas en el Mar de China Meridional con Taiwán, Vietnam y las Filipinas, entre varios países, y se encuentra en un desacuerdo diplomático con Estados Unidos en cuanto a la contención del programa nuclear de Corea del Norte.
Con información de AFP y Reuters