Mateo Kovacic evita el ridículo en Polonia

02 noviembre 16
Mateo Kovacic evita el ridículo en Polonia

Agencias

El Real Madrid sufrió más de lo esperado ante el Legia de Varsovia en Polonia, en un partido jugado a puerta cerrada por los incidentes en el Legia – Dortmund del pasado mes de septiembre. A pesar de ponerse 0-2, los de Zidane vieron como los locales remontaban el encuentro y tuvieron que conformarse con el empate final gracias al gol de Mateo Kovacic en el tramo final.

Sorprendió Zinedine Zidane con la alineación. Fabio Coentrao volvía a ser titular en el equipo blanco 18 meses después. Ante un rival a priori bastante inferior, el técnico galo probó también un cambio de esquema. Álvaro Morata fue titular, pero también la BBC, con Kroos y Kovacic como únicos centrocampistas, un lujo a la altura de pocos equipos. Y las cosas no pudieron empezar mejor para el Real Madrid. En el primer minuto, Gareth Bale enganchó un balón botando en la frontal para sacar las telarañas polacas y encarrilar el partido.

El paso de los minutos no hizo más que confirmar la superioridad de los visitantes. Tras una lluvia de ocasiones que no acabaron incomprensiblemente en gol, finalmente fue Karim Benzema el que ponía el 0-2. Un gran pase al espacio de Kovacic dejó solo a Bale, que la cedió al galo para perforar la meta polaca. Sin embargo, el Legia avisaba con acciones aisladas. Moulin probó suerte desde casi 30 metros y su disparo rozó la madera. Más suerte tuvo Vadis Odjidja-Ofoe poco antes del descanso. El delantero belga del Legia recibió en el vértice, se hizo un hueco y colocó un misil en la escuadra para competir con Bale por el mejor gol del encuentro.

Tras el descanso, los blancos se relajaron por el poco ritmo del encuentro y lo pagaron. Radovic, que ya marcó en el Santiago Bernabéu, sorprendió con un disparo raso lejano que Keylor Navas no pudo atajar. Empate y sorpresa en Varsovia. Zidane reaccionó y dio entrada a Lucas Vázquez por Benzema justo después de una clara ocasión marrada por el delantero francés. Tampoco Cristiano acertó, ni de jugada ni de falta. El Legia cerraba bien y el mejor del Real Madrid era Kovacic ante el bajón de Bale. La entrada de Asensio fue la última carta de Zidane y los espacios atrás fueron letales.

En una rápida contra, el Legia remotaba el partido gracias a la diana de Moulin que volvía el partido en una ruleta rusa. La alegría poco le duró al equipo polaco y Kovacic devolvía las tablas al marcador en dos minutos. No obstante, la reacción fue insuficiente y el partido acabó en un empate que deja el liderato en manos del Dortmund.

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